Altas Horas

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Grupo pop-rock con raíces folk albaceteño que surge en 1987 tras la disolución de La Retahíla. Ellos eran Vicente Ríos (voz, guitarra y zanfona), Noé González (voz, bajo y programación de batería y percusión electrónica) y Asclepiodoto López (Mandolina, laúd y bouzouki). A ellos se les unieron Adolfo Rivero (guitarra clásica, guitarra electrónica y sintetizadores) y Pedro Pascual (teclados).

Durante un corto periodo de tiempo siguieron con el nombre de Retahíla (sin La), hasta que deciden bautizarse como Altas Horas.

Con este nombre, ese mismo año (1988) entran a los estudios de grabación Quarzo (Madrid) y Nash Studios (Oakland, California), para grabar su único trabajo discográfico titulado ‘Retahíla’, compuesto por ‘La Luna cae de tu ventana’, ‘Sobre la ciudad’, ‘Te pierde la noche’, ‘El padre de las luces’, ‘Mortal aguijón’, ‘Tarantela de Almagro’, ‘Noche de mayo’, ‘Distancias’ y ‘Tres hermanas’. Fue editado por el sello MV (Master Visión, Barcelona), producido por ellos mismos, junto a Adolfo Rivero, y mezclado por Kenneth Nash (percusionista americano), quien también colaboró en la percusión. En single se extrajeron los temas ‘Mortal aguijón/Sobre la ciudad’. Este trabajo de ejecución laboriosa se traduce en una pequeña exquisitez llena de guiños tradicionales. Otro disco que no miró injustamente los canales precisos para el reconocimiento popular aunque, ya de por sí, estuviera rodeado de un clima diferente dada su condición de estilo indefinido. Todos ellos con tendencias y estilos distintos hicieron posible la fusión de la música experimental con el pop de vanguardia.

Cabe mencionar que como las portadas ya estaban en marcha, se pusieron unas pegatinas para corregir el nombre, quedando como nombre del grupo Altas Horas y como título Retahíla.

Durante su trayectoria llegaron a realizar un gran número de conciertos. Contaron con la colaboración de los músicos Nel Ródenas (guitarra eléctrica), Miguel Ángel Ródenas (guitarra eléctrica), Luis Campos (percusión y batería) y Juan Luis "Saltamontes" (batería).

Tenían planes de grabar un segundo trabajo pero, al no tener una compañía discográfica que les pudiera editar, quedó sin terminar, dejando tras de sí piezas como ‘La huella del Sol’, una voz de alarma que sitúa el foco sobre la deshumanizada competitividad laboral y social en la España de aquel entonces. El grupo terminaría por disolverse en 1991.

Posteriormente, Adolfo Rivero grabó en solitario ‘Night Light’ para Grabaciones Accidentales (1990). Al año siguiente fue ‘Kenneth Nash & Adolfo Rivero’, editado por su propio sello discográfico (Producciones Adolfo Rivero). Por su parte, Noé González siguió vinculado a la música siendo partícipe de formaciones como Funkenstein, Altozano, Funkamatic, Orquesta La Habana o La Fundación.



Redacción Nuevaola80. Reyes Sánchez. 
(Aportaciones: Noé González, Canal Youtube Noé González)

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