Avíos del Puchero

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El germen de esta banda de punk rock sevillana hay que buscarlo en el año 1986, en concreto en el Instituto Martínez Montañés, cuando a un grupo de amigos les empieza a picar el gusanillo del punk y se tiran de cabeza a escuchar The Damned, Sex Pistols, Ramones, The Clash, Meteors o Joe Jackson.

Con estas influencias deciden montar una banda y a finales de 1986 nacen Los Avíos del Puchero: Miguel Ángel Batanero “Bata” (voz), Juan Manuel Barea (guitarra) más adelante sustituido por Manuel Rodríguez Dastis, Carlos Márquez (guitarra), Luís Piñeiro (bajo) y Javier Dastis (batería).

Eligen su nombre con la ocurrencia que les pareció la mayor tontería de las propuestas: Federico Yerbabuena y los Avíos del Cocido, reducido a Los Avíos del Cocido, pero popularmente conocidos como Los Avíos. Aclaración para los que no son de la zona, el nombre significa: ingredientes de un cocido.

Para la mayoría de sus componentes era su primera experiencia en un grupo y poco después de empezar a ensayar (noviembre de 1986) debutan actuando en su instituto.

Los Avíos no inventaron nada, pero su energía, agresividad verbal, velocidad de los temas y movilidad escénica los hacen destacar; sus letras rebosan gracia, picardía, crítica y diversión.

En sus primeros tiempos comparten local, instrumentos e incluso componentes con Reincidentes.

En 1987 dan su primer concierto “serio” en la Sala Fun Club de Sevilla.

Graban varias maquetas (en la primera de ellas colabora José Luis Nieto al saxo) pero tan solo dos de sus temas (‘Servilla’ y ‘El Pervertido’) se llegan a plastificar en vinilo dentro del recopilatorio ‘Nuevas ideas para una vieja fábrica’ que edita Trilita Records en 1988. Este disco fue, además, la primera referencia plasmada en ese formato por Trilita, y vio la calle acompañando al número 5 del fanzine que dirigía Paco Cruces (y que hasta ese momento solo contenía maquetas en formato cassette). Se trataba de una edición limitada a 1000 copias, de la portada y la contraportada se encargó (de forma artesanal, en serigrafía, una por una) Jorge Clarasó. Acompañando a Los Avíos del Cocido, aparecen: Reincidentes, Garganta Seca, Helio, A Través del Espejo, Ragtime, Prisioneros del Tiempo, Gatos Fríos, La Caótica Banda Urbana, Entresuelos y El Último Nardo Que Cogió Bernardo.

Este fanzine, desde el año 87, los ha considerado revelación rockera al igual que alguna emisora municipal y también fueron reconocidos por Jesús Ordovás en su Diario Pop.

Llegan a participar en el concurso rock Villa de Bilbao.

En 1992 la banda se disuelve. 

Redacción Nuevaola80. Ricky Rodríguez.
(Aportaciones: fa20.es, Canal Youtube Nuevaola80)

El Último Puente

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Con el británico Ben Thirkettle (procedente de Oxford) al frente, El Último Puente fue uno de los grupos más prolíficos y duraderos de los nacidos en Córdoba. 

Surgieron a principios de 1986 desde los anteriores Jaleo, con Ben Thirkettle (voz y guitarra), Pablo León (guitarra), Juan de Dios García (guitarra), Carlos Sánchez (bajo), Eduardo Viñolo (batería) y Charly de La Mata (teclados), a los que Thirkettle fue ganándose uno a uno. 

Benjamín era una mina inagotable de canciones con una media de tres ó cuatro diarias de las que, como mínimo, una era genial. Por ello, cada concierto era distinto al anterior, y de imprevisible repertorio. Cantar en inglés, cuando la eclosión del “todo vale” español estaba en plena ebullición, era arriesgado, y aun no muy digerible. 

Aunque se reconocían acérrimos seguidores de Talking Heads en su etapa como Jaleo por su estilizado funky-pop, hubo de todo cuando pasaron a ser El Último Puente: rock, blues, pasajes siniestros de la época y guiños a la raíz flamenca y andaluza, todo un gran angular sedimentado en una base común y un amplio bagaje musical que aportaban cada uno de los componentes fijos y provisionales. 

Pasaron por sus filas Juanjo López, Miguel Ortiz, Charli Japón y el búlgaro Boris Dimitrov. 

A pesar de la gran cantidad de excelentes trabajos en maqueta, y de estar en varias ocasiones muy cerca de entrar en la rueda industrial discográfica, la labor de marketing nunca fue su fuerte, sí, en cambio, las contracorrientes, que siempre distinguen pero casi nunca encumbran, en términos comerciales, como el desubicado “don” de la inoportunidad idiomática. 

No obstante, las críticas y la asistencia a su profusa cantidad de conciertos les hacen recordar como uno de los grupos más respetados en el microcosmos de la época. 

Aparecen en varios discos recopilatorios, siendo de los más significativos el titulado genéricamente '27 Puñaladas', en su número 3, con el tema 'Malcom McFly', por el que fueron curiosamente comparados a The Cure, más tarde incluyeron dos canciones en el disco compartido, 'Seispordosdoce', con grupos cordobeses, además de ser incluidos en 1990 en el 'Singles del año 90. Antología anual de grupos andaluces' de Trilita con los temas 'Please' y 'Singing'.

Fueron invitados por RNE, Radio 3, para tocar en directo, calificados como grupo de culto, así como en varios programas de televisión. 

Charly falleció en diciembre de 2002 y, actualmente, Ben vive en Londres y sigue haciendo canciones.

 

Redacción Nuevaola80. Pedro J. Pérez.
(Aportaciones: Dolores Correa, hechoencordoba.com, Luís Clemente, 27 Puñaladas, Canal Youtube sanchezadvertaising)

Puppa

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Desde el suroeste de Córdoba, concretamente de la localidad de Rute, llega esta banda de poco recorrido que agrupaba a principios de la década de los ochenta a Juanma Terrón (guitarra), Quisco de Asís (guitarra), Frasco Terrón (bajo) y Antonio Gómez (batería).

Los inicios de Puppa se remontan a 1978 con su anterior grupo, conocido como Mogollón en el que ya coincidieron los hermanos Terrón y Quisco, junto Javielo y José Canuto. En aquel entonces, Frasco se ocupaba de la batería.

El cuarteto disfrutó de años intensos y, sobre todo, mucha diversión, característica propia de quienes vivieron la movida musical de aquellos entonces. Destacar un concierto en el Mesón de los Naranjos en el que el mismo grupo actuó con tres nombres y estilos diferentes: como Puppa, como Los Fresquillos (rock and roll clásico con versiones de Carl Perkins, Elvis, Moris y temas propios muy particulares como ‘Beberemos cerveza fría en el bar del Madre Mía’, ‘Fea’ o ‘Menos autonomía y más droga’) y, por último, como Jazz se murió el Burro, como no podía ser de otra manera, en clave de jazz.

En 1982, participan en el 1er. Concurso Andaluz de Rock Alcazaba de Jerez de la Frontera al que se presentan nada menos que 52 grupos con su correspondiente maqueta bajo del brazo. Tras la primera selección, se hace una eliminatoria en la que tocan un solo tema y Puppa aporta ‘Fantasmas’ que, desde luego, no dejó indiferente al jurado, y se clasifican para semifinales. Incorporan a Ben (saxo y flauta), que ya había estado en el grupo jerezano Triunvirato, e interpretan cuatro temas que les transportan a la final en la que comparten escenario con Danza Invisible (los ganadores finales), Jaleo de Córdoba y Rompe Hielo de Sevilla, con Gabinete Caligari como grupo invitado. Por el camino quedaron formaciones del calibre de los granadinos 091, los gaditanos Destrozamitos o los ceutíes Ángel y Los Vecinos del Quinto.

Dos años después, incorporan a Antonio Lucena en la batería pasando Antonio Gómez a la percusión. Graban un par de maquetas y se convierten en Sociedad Café.

Redacción Nuevaola80. Pedro J. Pérez.
(Aportaciones: Frasco Terrón, Quisco de Asís, hechoencordoba.com)